Ante una frenada de emergencia en moto... ¿sabes qué hacer y qué no hacer? Y si sabes qué hacer ¿sabes cómo hacerlo? Un obstáculo, un automóvil que se detiene frente a ti... en caso de emergencia ¡frena! pero frena bien.
SÍ - Frenar progresivamente Hay que saber cómo frenar. Accionar el freno de manera progresiva hasta conseguir la máxima presión conseguirá transferir el peso sobre la rueda delantera, lo que hará que el neumático delantero se adapte y consiga un mayor superficie de contacto con la carretera, y por tanto un mejor agarre y adherencia.
NO - Frenar al máximo desde el principioIncluso con frenada ABS, si presionamos al máximo el freno desde el comienzo lo único que conseguiremos es que el neumático delantero no consiga la máxima adherencia. Sin ABS corremos el peligro de perder agarre y sufrir una caída al frenar con brusquedad, y con ABS éste actuará y la distancia de frenado será mayor.
SÍ - Usar los dos frenosAnte una frenada fuerte el peso se transfiere al tren delantero, aligerando el trasero y provocando una pérdida de estabilidad. Usar el freno trasero a la vez que el freno delantero hará que el tren trasero baje, se pegue más a la carretera, se gane estabilidad y también se mejore la tracción. Usar los dos frenos a la vez ayuda a reducir la velocidad con mayor velocidad.
NO - Usar sólo el freno trasero El freno trasero no es sólo mucho menos potente que el delantero, sino que en una frenada el peso se transfiere al tren delantero y el trasero queda aligerado, por lo que es más fácil que el neumático trasero pierda agarre y pueda deslizar y derrapar. Usar sólo el freno trasero provoca una pérdida de tracción. 
SÍ - Atento al tráfico que te rodea Por vías públicas no circulas en solitario y has de estar atento a todos los vehículos que te rodean, no sólo por delante, sino también por detrás y por los lados. Deja un buen margen de seguridad para que en caso de frenada de emergencia tengas capacidad de maniobra para hacerlo de forma segura.